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Aplicar sin cumplir todos los requisitos y otros 4 hábitos ganadores de los profesionistas empleables


Sé que al inicio puede parecer lógico, pero buscar trabajos para los que estás totalmente cualificado es un gran error.

¿Por qué?

Porque tú mismo te puedes estar cerrando la puerta a oportunidades increíbles.
La empleabilidad estratégica tiene un mapa que inicia con una mentalidad ganadora.

¿Crees que cuando una organización abre un proceso de postulación va a poner el perfil mínimo necesario para cubrir un puesto?

Los requisitos de una oferta laboral son una lista de deseos. Las organizaciones están buscando a un empleado soñado.

Las empresas publican los requisitos ideales, pero en la mayoría de los casos encontrarás que están dispuestas a considerar candidatos que no cumplan con todos los requisitos, siempre y cuando tengas habilidades y experiencia relevantes.

Más que lo que sabes en este momento, a las empresas donde vale la pena trabajar les interesa lo que puedas aprender, cómo te adaptas a los cambios y qué tanto match haces con la cultura de la organización.

Los profesionistas empleables con una mentalidad ganadora conocen esta realidad.

Utiliza a tu favor los siguientes hábitos para llevar tu carrera a nuevos niveles.

HÁBITO 1: Aplicar sin cumplir 100% con los requisitos de una oferta laboral.


Entiendo el impulso que puedes tener a no postularte a una vacante para la que sientas que no estás totalmente cualificado.

Quizá te digas que no quieres perder tu tiempo o respetar el tiempo de los reclutadores.

Puede que incluso me digas con honestidad que dejas pasar la oportunidad potencial porque no quieres sentir el rechazo en esa vacante que tanta ilusión te hace.
Como candidato, es importante que entiendas la diferencia entre los aspectos “deseables” y los “indispensables” cuando analices los requisitos de una oferta.

Sin embargo, así como es poco probable que encuentres a la empresa perfecta con la que no haya nada que necesites negociar, es casi imposible que una empresa encuentre a ese “candidato ideal” que describen en sus ofertas.

Es una dinámica que si no estás al tanto capaz te parezca extraña, pero justo por eso buscar empleo va de relacionamiento, negociación y estrategia.

En general, primero evalúa si cumples con un 60%-70% de los requisitos y no hay ningún indispensable que te descalifique (por ejemplo, si dicen que solo considerarán a personas que vivan en España y no vives allá).

Luego, si quieres ese trabajo, ¡postúlate!

Te aseguro que tienes más posibilidades de las que imaginas.

Ahora, postularte es solo un paso, los trabajos te los ganas en la entrevista.

Por eso los siguientes hábitos marcan aún más la diferencia.

HÁBITO 2: Reconocer y abordar las brechas de experiencia laboral de forma proactiva.


¿Tienes dudas sobre cómo enfrentar esos descansos profesionales en los que estuviste sin trabajo?

Tranquilo, es una incomodidad muy común.

En general, hay muchas maneras de presentar una brecha laboral en tu historial de una forma que te beneficie.

El peor camino suele ser ocultarlas o pretender que no existen porque puede transmitir falta de transparencia y llevar a que el entrevistador desconfíe de ti.

La clave está en que las reconozcas de manera proactiva y las presentes como parte de tu viaje profesional.
Al momento de dar tus respuestas, apóyate en recursos de storytelling para transformar cualquier temporada sin empleo en una historia que resalte tus habilidades de adaptación, aprendizaje y crecimiento.

Enfoca tu presentación a cómo tu historia se relaciona con el puesto y proyectarás ser alguien resiliente y orientado a soluciones.

HÁBITO 3: Investigar a fondo la empresa antes de la entrevista.


Hay una frase que leí hace tiempo que dice “si quieres resultar interesante, muéstrate interesado”.

Considero que aplica muy bien a la empleabilidad estratégica porque llegar a una entrevista sin preparación es como conducir en una ciudad que no conoces y sin GPS; se va a notar enseguida que no perteneces a ese lugar.

Como parte de mi metodología recomiendo siempre que investigues a la empresa.

Sumérgete en la cultura, proyectos e hitos recientes. Lee la página web y algunos perfiles de los empleados actuales para conocer los valores y objetivos de la organización.

Imagina la entrevista como tu oportunidad para demostrar que no solo estás buscando un trabajo, sino que estás buscando contribuir al crecimiento y misión de la empresa.

HÁBITO 4: Anticiparse a preguntas desafiantes en la entrevista.


La preparación hace al profesionista empleable, por eso este hábito está muy relacionado con el anterior.

Improvisar tus respuestas puede lastimar la impresión que dejes en la entrevista, afectar tu capacidad para destacar y mostrar tus habilidades de manera efectiva.

Dentro del Club de Profesionistas Empleables tenemos una simulación de entrevista al mes.

Practica tus respuestas a las preguntas difíciles que puedan hacerte para que te expreses con claridad, seguridad y confianza.

Estas son algunas de esas preguntas desafiantes:

“Háblame de ti”.
“¿Cómo te ves de aquí a cinco años?”
“¿Por qué quieres trabajar en esta empresa?”
“Cuéntame sobre tus fortalezas y debilidades”.
“Cuál ha sido tu error profesional más grande”.


HÁBITO 5: Enfocarse en beneficios más allá del salario a corto o mediano plazo.


Te reafirmo que lo que diferencia a los profesionistas empleables de otros es su mentalidad.

Un profesionista empleable no va a una entrevista para evaluar un trabajo, va para evaluar una oportunidad de contribución y crecimiento.

Un profesionista empleable entiende que el valor de un trabajo va más allá de un salario mensual.

No me refiero solamente al salario emocional en este punto.

Me refiero al hecho de que los profesionistas empleables no son personas que se puedan comprar con dinero.

Son personas que al evaluar una oferta laboral, consideran la cultura empresarial, oportunidades de desarrollo profesional, beneficios adicionales y el potencial de crecimiento a largo plazo.

Si quieres ser un profesionista empleable pregúntate a ti mismo:

¿Cómo contribuirá esta oportunidad a mi carrera en el futuro?

LOS 5 HÁBITOS DEL PROFESIONISTA EMPLEABLE EN ACCIÓN.

Como ves, estos cinco hábitos te permiten tomar decisiones laborales fundamentadas y alineadas con tus metas profesionales.

Llevar tu carrera profesional a un siguiente nivel siempre tendrá asociados nuevos retos.

Mira más allá de los requisitos básicos, reconoce oportunidades en tus descansos laborales, investiga a fondo cada empresa, anticípate a los desafíos y evalúa oportunidades.

El mapa de la empleabilidad conlleva una mentalidad ganadora, profundo autoconocimiento y un plan llevado a la acción.

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