Aprender jugando es sin duda una metodología que a muchos les hubiera gustado disfrutar en el colegio, la universidad o en sus experiencias laborales. Pero, ¿de qué se trata este método y cómo se aplica?
La gamificación se trata de aprender de manera lúdica y se aplica en distintos ámbitos. Consiste en transmitir conocimiento, conceptos, y diversa información a través de metodologías ligadas a juegos.
El término gamificación es bastante nuevo, y es la castellanización de “gamification”. Algunos ejemplos de esta novedosa metodología son el enseñar a sumar y restar por medio de aplicaciones interactivas donde los alumnos juegan mientras aprenden. También se aplica para entender el orden de los productos en un almacén o para el proceso de producción en una fábrica.
¿Por qué implementar la gamificación?
Utilizar la gamificación genera beneficios como la motivación, ya que el usuario puede obtener una puntuación, un reconocimiento, etc. Además, en el caso de los trabajadores, mejora la concentración y aprendizaje, pues a nadie le gusta perder.
A través de esta metodología, en el caso concreto de las empresas, se busca que las personas estén motivadas a aprender, mejorar su habilidades y competencias en un tema específico, o a que interioricen información importante como valores o nuevos procesos.
Dentro de una empresa se trata de crear juegos o adaptarlos a las funciones laborales. Muchas veces la gamificación es utilizada en los procesos de inducción para nuevos puestos o nuevos ingresos, en capacitaciones, para presentar nuevos proyectos, etc.
Esta metodología aplicada a una empresa permite también crear compromiso y fomentar la interacción entre los trabajadores y distintos equipos de trabajo, lo que ayuda a mejorar las relaciones laborales.
Pero no solo se aplica para el público interno, sino también para mejorar la interacción con sus clientes. En estos casos la gamificación puede formar parte de una estrategia para introducir un nuevo producto, hacer una campaña de intriga, sortear un premio, etc. Y se ha demostrado que utilizarla significa un gran impulso para una marca, su interacción con su público, y sus ventas.
En resumen, ¿Cuáles son las principales ventajas de aplicar gamificación en las empresas?
– Mejora la comunicación: tanto con el público externo como el interno, ya que permite dar y recibir correctamente una información.
– Ampliar la difusión: un juego siempre llama la atención, por lo que al implementarlo el boca a boca ayudará a que se difunda rápidamente.
– Ayuda al posicionamiento web: esto para cuando generas una campaña enfocada a tu público externo, ya que tendrás más visitas de lo habitual gracias al juego.
– Fidelización: para ambos casos, tanto trabajadores como clientes, se logra que se identifiquen con la marca gracias a la interacción.
Esta tendencia a la gamificación es cada vez más común entre las empresas que buscan crecer en el mundo digital y mejorar la experiencia de sus clientes y trabajadores.
Y tú, ¿ya la conocías? o ¿ te gustaría utilizarla alguna vez?
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